Antes de que naciera la serie, en 1992 se hizo una película que también se llamó Buffy la cazavampiros que protagonizaban Kristy Swanson (Buffy), Luke Perry (Pike) (antes de hacerse famoso con Sensación de vivir), Donald Sutherland (Merrick) (el único de la película, con Rutger Hauer, que entonces era famoso), David Arquette (Benny, amigo de Pike que se transforma en vampiro) y Hillary Swank (amiga de Buffy).
En realidad las historias son muy distintas. Ni siquiera se puede
considerar como la vida de Buffy antes de llegar a Sunnydale, ya que no coinciden con lo
que en la serie nos han contado.
En la película los vampiros no cambian de cara, solo de orejas, y,
eso sí, tienen colmillos puntiagudos. Buffy por su parte tiene dolor de estómago cada
vez que hay un vampiro cerca. En general los vampiros son más lentos, y no se hacen polvo
cuando les clava una estaca en el corazón (impagable
la larga agonía de uno de los vampiros cuando Buffy le mata, eso y la visita de Benny a
Pike tras convertirse en vampiro, lo único rescatable, por esperpéntico, de la
película).
Similitudes: Buffy pasa de ser muy popular (era animadora) a ser dada de lado por sus amigos, que no pueden aceptar su cambio y se hace amiga de alguien ajeno, rechazado e impopular como Pike.
En resumen, una película totalmente prescindible para los
seguidores de la serie a no ser como simple curiosidad.